jueves, 22 de noviembre de 2007

Un cuento de hadas

Trata el cuento de la antigua China (250 a. C.), de un príncipe que iba a ser coronado emperador, y estaba soltero. Tenía que casarse y para poder escoger esposa hizo una fiesta en palacio a la cual invitó a las jóvenes más bellas y ricas de la corte. Había una jovencita cuya madre era empleada en el palacio y ella sabía que su muchacha adoraba al príncipe. Pues tuvo la osadía de presentarse a la reunión. El príncipe repartió una semilla a cada joven presente y les dijo que dentro de seis meses tenían que presentarse de nuevo a palacio llevando cada cual una flor y la que llevara la más bella sería la emperatriz. Así sucedió, pero nuestra jovencita por más que cuidó su semilla no logró que siquiera tallo echara y muy apenada eso mostró al príncipe, quien acababa de revisar las hermosas flores que le llevaron las otras jóvenes. Cuál sería la sorpresa cuando el príncipe presentó a la hija de la empleada del palacio como su futura esposa. Y explicó: a todas les dí unas semillas estériles pero ella cultivó la mejor de todas, la de la honestidad.
Paulo Coelho.

1 comentario:

laura dijo...

DELIA NO VAS A CREER PERO HACE COMO DOS DIAS LEI ESO MISMO Y ME ENCANTO, QUE CASUALIDAD QUE AHORA TU LO SUBES A LA PAGINA..BRAVO POR TI. ES LINDO Y TIENE MUCHO MENSAJE.BESOS